lunes, noviembre 17, 2008

Para ti...

En el mundo no hay templos.
No hay templos dignos de tu existir,
voy a esculpir la luna para transformarla en un templo,
un templo solo para ti,
donde existirá tu imagen por siempre,
donde viviremos eternos en un eco de pasos y risas.
Déjame esculpir tu figura, hermosa,
déjame creerme un dios,
y tallar tu cuerpo como lo hicieron ellos con todo esmero,
para llevarte a la tierra y conocerme a mi,
el más común y ordinario de los mortales,
y con tu beso hacerme sentir el más importante humano,
el más especial.
Siento tu piel, viajo, siento, me pierdo, me resbalo, creo y creo en mi creación,
semejante a tus ojos, diamantes de ambar de la savia pretificada del arbol de la vida,
Te beso y me salen alas... te amo y comienzan a batir en un vuelo desenfrenado,
desatando tormentas y huracanes, transformando el mundo en olas de aire silbante que rodea los cuerpos de la explosión, aviva los fuegos fatuos danzantes, y hace brillar el mundo en una luz propia, transformando el planeta en una estrella.
Déjame volar contigo hasta mostrarte el universo desde lejos,
y observemos abrazado yo a tu cintura
la pequeñez de la existencia de los hombres,
y lo lejos que podemos lllegar nosotros,
solo con un par de alas de sábanas arreboladas.



Pablo Serey

2 comentarios:

Tu Sol dijo...

Te amo y me pierdo en tu universo...
Gracias por vuestras palabras amor, me hacen sumamente feliz...
En estos instantes mi cuerpo bulle de dolor y de letargo, pareciese que lentamente va cayendo al suelo y se rompe en miles de pequeños pedazos que se esparcen por el universo...

¿Recogerías los pedazos por mí? ¿Me recostruirías amor? Mi alma te acompaña en aquella misión... Mi corazón será tu lámpara y mi amor, tu fuerza.

Te amo...

Sol

Lluvia dijo...

mira lo que me encontré!